jueves, 30 de diciembre de 2010

Deseos


Al borde de la despedida de este 2010 tan agitado para muchos, tan conmovedor para mí (nació mi nieta, publiqué mi tercer libro, abrí mi taller de narración oral, vi marchar a mi hija rumbo a Alemania), no quiero mirar el pasado sino expresar, con la mayor fuerza posible, mis deseos:

ojalá podamos hacer entre todos un año feliz (¿hace falta llenar de contenido esta palabra?) lo que tal vez signifique el comienzo de un mundo un poquito mejor.

Brindo por los fieles eternautas, necesitados de decir y decirse, confiados en que la palabra de cada uno, de todos, habrá de cumplir al fin su misión en este mundo.

Fin de año

Fin de año.
Decimos: el tiempo se nos escapa de la mano
sin darnos cuenta de que somos nosotros
-agua y tierra-
los que nos vamos escurriendo sin remedio
mientras
el tiempo sigue ahí
imperturbable
sereno en su quietud de brazos extendidos
desde antes
mucho antes
hasta un después inabarcable.

viernes, 10 de diciembre de 2010

"Alguien te tiene que mostrar lo que pasa" o el elogio del blog

Cuando era chica me enseñaron que no debía usar el nombre de Dios en vano. Siempre traté de cuidarme de semejante herejía. Pero creo que no es banalizar la cosa decir con total convicción: "¡Gracias a Dios, existe el blog!". El blog, tu blog, mi blog, millones de blogs, que día a día van registrando el mundo personal de sus autores y todos los vínculos que cada uno de ellos establece. Millones de blogs que publican poemas, cuentos, opiniones, invitaciones, sugerencias, fotografías, cuadros, videos, dibujos, animaciones y todo cuanto la creatividad del ser humano pueda producir. Y eso es lo que pasa. Y pasa de un modo rotundo, tanto que muchas veces puede cambiar la vida de quien publica o de quien lee, de quien muestra o de quien ve.
No estoy de acuerdo con ningún tipo de monopolio, ni privado ni estatal. Creo que lo que pasa es tan vasto y diverso que ningún medio puede arrogarse el privilegio de abarcarlo, sobre todo si ha decidido especializarse en determinado aspecto de la realidad. Esto no es criticable: todos nos especializamos en algo, elegimos un camino, un estilo, una temática. Lo terrible es creernos y hacer creer que eso es lo único o al menos lo único importante. Es una muestra de autoritarismo disfrazado de servicio público. Es decir, lo mismo que venimos soportando de uno y otro lado del ring sociopolítico en el que hemos sido encerrados los sufridos ciudadanos, que, como atontados por los golpes, vemos cómo cruzan sobre nuestras cabezas acusaciones y desafíos de todos los colores, sin poder recuperar nuestra capacidad de reacción.
Pero están los blogs, nuestros, verdaderos. Benditos rincones donde pasan cosas maravillosas, tran ciertas y necesarias como el aire.
¡¡Bendito sea el blog que muestra lo que pasa!!

lunes, 29 de noviembre de 2010

Gran degustación gran


Cerramos el año a puro cuento, nomás. Cuentos de aquí y allá, cuentos largos y cuentos cortos, dulces, salados, amargos, ácidos, picantes. Cuentos para todos los gustos. Y nos dimos el gran gusto, Elena y yo, de contar con amigos, familiares, gente querida, narradores que tuvieron la gentileza de venir a escuchar, la querida Patricia Morante, que tuvo la gentileza de venir a narrar, la gran sorpresa de encontrar entre el público, nada menos que al maestro Alberto Ponzo, que se vino así, calladito, sencillo en su porte, generoso en su actitud. Y que saboreó los cuentos con placer. Luciana fue la mujer-orquesta: dj, bufetera, anfitriona. Inesperadamente, como si la gente hubiera querido prolongar la velada, se armó un debate jugoso, bien nutritivo, en el que todos querían participar. Y como broche de oro, hicimos un brindis por la amistad, por el arte, por los sueños, por el futuro.
¿Cómo no sentir una profunda gratitud? ¿Cómo no sentir el magnífico sabor de un sueño realizado?

sábado, 27 de noviembre de 2010

Gala en Castelar





Ayer a la noche fue la Gran Gala. Diecisiete alumnos del taller Arteoeste, de la Profesora María Gabriela Morales, presentaron sus obras. Fue en La Salita, de Castelar. El teatro se llenó de belleza, de arte, de amigos, de música, de palabras, de alegría. Germán y Cecilia aportaron música y canto, la profe, muy emocionada, presentó a sus alumnos, los artistas, con cierto pudor, subieron al escenario a recibir sus distinciones y yo aporté poemas y cuentos para completar esta celebración del arte. No puedo sentir más que agradecimiento a quienes me convocaron a compartir mi palabra y, sobre todo, a disfrutar de tan hermoso encuentro

lunes, 22 de noviembre de 2010

Hoy, degustación de cuentos

Hola, hermosa gente. ¿Están pensando en una tarde distinta, sabrosa, íntima, cálida y a media luz? ¿Una tarde que entibie el corazón con emociones, buena música y esa reinita indomable, la palabra, hecha grito o susurro, donación o reclamo? Vénganse nomás el domingo a las 18.30 hs a La casita. La degustación de cuentos estará servida.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Encuentro de artes


El próximo viernes, el Taller Arteoeste realizará su muestra anual. Allí estarán amigos queridos presentando sus obras, es decir, abriéndonos pequeñas y bellas ventanas al interior de sus almas. Y allí estaremos, claro, para acompañarlos, Germás Navas con su maravilloso saxo y yo con algunos poemas y algunos cuentos. Se trata de encontrarnos, sumarnos y celebrar el arte, contundente y esencial.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Atardecer en La casita





Entre cantos y cuentos, el fervor de los amigos y presencias ilustres (Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Carlos Fuentes, Eduardo Galeano, Joan Manuel Serrat), Elena y yo vivimos una tarde mágica. Fue cuando el día empezaba a ser noche, y la palabra se hacía conjuro y los misterios, milagros. La casita, pequeña, cálida como siempre, nos cobijó. Pero hizo algo más: fue el caldero imprescindible para que el hechizo se fuera cocinando a fuego lento y nos fuera inundando a todos con sus vapores. Todos salimos transformados. ¿Conocen a alguien que puede resistirse al poder de tan maravillosa alquimia?

martes, 12 de octubre de 2010

Elogio del agua




Me sigue movilizando el tema del agua. Parece que su blanda
humedad me persigue. Mi nuevo libro se llamará, creo, Nacidas
del
agua. De él extraigo este poema:




Agua II

Sería bueno
de una vez por todas
llamar francamente hermano
al hermano río
empezar a ver la materia misma
que lo recorre y nos recorre
y saber, sin embargo,
que él jamás tendrá
necesidad de nosotros
y nosotros en cambio
caminaremos sobre el tiempo abrumador
sobre incontables distancias
llevando siempre a cuestas
esta condición de sedientos insaciables.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Momentos para guardar II

Entre las numerosas sorpresas de esa noche mágica del 24 de septiembre, la casa cobra un protagonismo indiscutido. Me refiero a la Casa de la Lectura, Lavalleja 924, Villa Crespo, que nos abrió sus puertas como se le abre a los viejos amigos y amparó nuestro sueño con todos los cuidados y detalles, esperados o no, como orientar las luces para que embellecieran los cuadros, armar la calidez de un living sobre el escenario o prepararnos la mesa del brindis. Todo con amabilidad, calidez, entusiasmo y discreción. Los que hicimos esta presentación estamos realmente agradecidos y admirados y queremos destacar una actitud poco frecuente en la vorágine de la vida actual. Gracias al personal de la Casa de la Lectura por su profesionalismo y su calidad humana. Recomiendo visitarla y disfrutar de sus exposiciones y de su biblioteca.

Momentos para guardar I


El viernes 24 de septiembre hicimos una nueva presentación de La gota que horada los sueños. Digo "hicimos" porque efectivamente fue un acto colectivo donde se unieron las voluntades, los deseos y los sueños de organizadores, público y encargados del lugar. Estuvieron, como siempre, Patricia Morante y Gustavo D´Orazio con su calidad y su calidez. Hubo pinturas, de la mano de Silvia Fabricotti, cuyo blog recomiendo visitar (www.pinturassilviafabricotti.blogspot.com). Hubo música, gracias al talento de Germán Navas, que logró seducirnos a todos con el encantamiento de su saxo. Hubo sorpresas insospechadas, como presencias inesperadas y cálidas, reencuentro con personas y poemas del pasado, amigos entrañables que van andando y al andar construyen el camino de la amistad, siempre abierto y disponible. Hubo un público atento que preguntó, opinó y se apropió con todo derecho del evento, que se transformó así en un diálogo espontáneo y sorprendente. Hubo palabra, hubo voces, hubo poesía.
Por eso es un momento para guardar, pero no en un cajón del escritorio sino en la memoria, en la de la razón y en la del corazón; memorias productivas que hacen crecer ideas y sentimientos, que despliegan la creación y que buscan (cada vez más) el encuentro con el otro.

jueves, 23 de septiembre de 2010

La poesía es una larga pregunta

Ese es su sentido, preguntar, cuestionar, aún sabiendo que no habrá respuestas. Y sin embargo, la poesía no conduce a la frustración sino al placer de indagar e indagarse. Poesía en sentido pleno, la poiesis, el hacer con las palabras. Poiesis que no está solo en el género lírico sino en todo arte. En los cuentos populares, por ejemplo, cargados de metáforas y alegorías nacidas del pensamiento más profundo y, por lo tanto, más simple. Como este que encuentro en un blog amigo y que copio para compartir:

El cielo del gorrión
Anónimo turco


Había un gorrión minúsculo que, cuando retumbaba el trueno de la tormenta, se tumbaba en el suelo y levantaba sus patitas hacia el cielo.
-¿Por qué haces eso? -le preguntó un zorro.
-¡Para proteger a la tierra, que contiene muchos seres vivos! -contestó el gorrión-. Si por desgracia el cielo cayese de repente, ¿te das cuenta de lo que ocurriría? Por eso levanto mis patas para sostenerlo.
-¿Con tus enclenques patitas quieres sostener el inmenso cielo? -preguntó el zorro.
-Aquí abajo cada uno tiene su cielo -dijo el gorrión-. Vete… tú no lo puedes comprender…

En el mundo de los sueños todo es posible. . .



. . . Por ejemplo, seguir leyendo y compartiendo poesía, música, arte, amistad y, ¿por qué no?, algún vinito. Será mañana, 24 de septiembre, a las 19 hs., en la
Casa de la Lectura, Lavalleja 924, Villa Crespo, donde presentaré mi libro La gota que horada los sueños. Sueños de vidas pasadas, sueños de futuros inalcanzables, sueños.
¿Venís, para seguir soñando?

lunes, 20 de septiembre de 2010

Te doy mi palabra III

Como homenaje a mis queridos narradores nació este poema que les dedico:

El brazo salvaje de la poesía
afila sus uñas
en los corazones desprevenidos.

Como grito en la noche

como daga en la carne
como sombra
como luz estallando
son las voces que sacuden
esta caprichosa dormidera

grito
daga
sombra
luz
y ese pedazo de nosotros
triturado entre sus garras
hecho polvo
y al fin
a salvo.

Te doy mi palabra II

Dicen que un viajero llegó a un pueblo y vio al narrador sentado debajo de un árbol contando historias. Cientos de personas se reunían a su alrededor para escucharlo. Un tiempo después el viajero volvió a pasar y vio al mismo narrador sentado bajo el mismo árbol contando cuentos. Pero esta vez estaba solo. Le preguntó:
-¿Por qué sigues contando si nadie escucha?
El narrador respondió:
-Antes contaba para cambiar al mundo. Ahora cuento para que el mundo no me cambie a mí.

Esa es la misión del narrador: ser esperanza, semilla, siembra. La palabra sembrada siempre, más tarde o más temprano, aquí o allá, en unos o en otros, dará su fruto.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Te doy mi palabra y mi voz

Sé que ya pasó el día del amigo pero ¿qué pueden las fechas frente al sentimiento? Después de haber vivido ayer un maravilloso encuentro de hermanos en la hermandad de la palabra (justamente Te doy mi palabra 9, el festival de cuentacuentos que año tras año se realiza en Morón, junto con otras sedes) me siento desbordada de amistad y quiero hacer un regalo a mis amigos, a todos los que lean este blog. No elegí nada menos que Benedetti y su poema No te rindas:


No te rindas, aún estás a tiempo

De alcanzar y comenzar de nuevo,

Aceptar tus sombras,

Enterrar tus miedos,

Liberar el lastre,

Retomar el vuelo.

No te rindas que la vida es eso,

Continuar el viaje,

Perseguir tus sueños,

Destrabar el tiempo,

Correr los escombros,

Y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,

Aunque el frío queme,

Aunque el miedo muerda,

Aunque el sol se esconda,

Y se calle el viento,

Aún hay fuego en tu alma

Aún hay vida en tus sueños.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo

Porque lo has querido y porque te quiero

Porque existe el vino y el amor, es cierto.

Porque no hay heridas que no cure el tiempo.

Abrir las puertas,

Quitar los cerrojos,

Abandonar las murallas que te protegieron,

Vivir la vida y aceptar el reto,

Recuperar la risa,

Ensayar un canto,

Bajar la guardia y extender las manos

Desplegar las alas

E intentar de nuevo,

Celebrar la vida y retomar los cielos.

No te rindas, por favor no cedas,

Aunque el frío queme,

Aunque el miedo muerda,

Aunque el sol se ponga y se calle el viento,

Aún hay fuego en tu alma,

Aún hay vida en tus sueños

Porque cada día es un comienzo nuevo,

Porque esta es la hora y el mejor momento.

Porque no estás solo, porque yo te quiero.

martes, 14 de septiembre de 2010

El poeta

Un comentario de mi amigo Gustavo me hizo acordar a Fernando Pessoa:

El poeta es un fingidor.

Finge tan completamente

que hasta finge que es dolor

el dolor que en verdad siente.


Y los que leen lo que escribe,

en el dolor leído sienten

no los dos que el poeta tuvo,

solo el que ellos no tienen.


Y así por los carriles rueda

Para distraer la razón,

Ese tren a cuerda

que se llama corazón.

(Autopsicografía)

lunes, 13 de septiembre de 2010

Festival de Cuentacuentos


LLega el 9º Festival de Cuentacuentos Te doy mi palabra y una de las sedes es Morón. La inauguración es el jueves 16 a las 20 hs. y habrá funciones el viernes a las 21 hs y el sábado a las 17 hs. para niños y a las 21 hs. para adultos, todas en el Teatro Gregorio de Laferrere, San Martín y Brown. Habrá narradores locales, nacionales e internacionales. Entre los locales, tendré el gusto de participar en las dos funciones del sábado. Así que si tienen un niño a mano o si quieren pasar una noche distendida, dense una vueltita por el teatro. Allí estaremos los cuenteros para compartir nuestras historias.

13 de septiembre: Día del biblioiecario


Gracias, queridos bibliotecarios, por darnos de leer


Todos tenemos derecho a disfrutar
de un buen libro

sábado, 31 de julio de 2010

Un poeta para celebrar

Claro que no fue por casualidad, ya que las casualidades no existen. Pero lo cierto es que lo encontré sin buscarlo. Leerlo fue un descubrimiento inesperado. Se trata de Taciano Téndola, Hno. Marista, italiano por nacimiento y santiagueño por enamoramiento. De su libro póstumo, Treinta poemas santiagueños, elijo:

Ha nacido un chango

Juan ha nacido. ¿Y qué?

Ha nacido y basta.
Ya veremos

¿O quieren que una tormenta
de carbón
madure ya en su frente
como la sombra necesaria
de su vida?

Ha nacido Juan y basta.

(Un sol inédito
burbujea por las ventanas
entre aleluyas de pan casero
escapándose por las rendijas.
Roto el silencio de las esperas,
el pueblo desnuda su alegría
en el viento).

¡Achalay mi chango!
Ha nacido.

Y basta.

Podés contar conmigo


Te espero en mi


Taller de Narración Oral

Un encuentro con las posibilidades expresivas:
la voz, el cuerpo, el espacio.


Una herramienta de comunicación:
el narrador, el cuento, el destinatario

Sábados de 15 a 17 hs.

en

La casita
Ranchos 1593, esquina Machado

Comienza 7 de agosto

viernes, 9 de julio de 2010

Para Frida

Me sumo al homenaje recordando un poema que le dediqué y que publiqué no hace mucho:

“Esperar, con la angustia guardada,
la columna rota y la inmensa mirada.
Sin andar, en el vasto sendero,
moviendo mi vida cercada de acero”.
Frida Kahlo, La columna rota


¿Cómo fue que tu ojo
se sobrepuso a la negrura
y alumbró
el trayecto de la herida?

Todos los hombres confluyen en uno
pero es mujer quien amamanta
las bocas ansiosas de la vida.

Fue de tu leche que nacieron
todos los niños postergados
dulce pan de los dioses hambrientos.

Fue de tu leche que naciste,
preservada de todo mal,
y diste a luz tu repertorio de Fridas
cada una con su ojo
alumbrando dolor.

domingo, 4 de julio de 2010

Cantos y susurros







Entre cantos y susurros, bellas pinturas y renovada amistad, el sábado 3 de julio presentamos La gota que horada los sueños. Fue una celebración de las artes: hubo poesía, música, voces distintas en tonos y ritmos y una invitada especial: las pinturas de Silvia Fabricotti, Liliana Otranto y Adriana Remesar, que no vinieron a adornar las paredes sino a cobijarnos al amparo de su belleza. Quienes quieran seguir disfrutándolas, pueden verlas hasta el 16 de julio en la Biblioteca 9 de Julio, Martín de Irigoyen 520, Castelar.
Pienso que ha de ser muy bueno el destino de este libro que nació así, rodeado de belleza y de amistad, apadrinado por dos exquisitos poetas: Patricia Morante y Gustavo D´Orazio, arrullado por las voces maravillosas de Marcela Schirrito y el grupo Ida y vuelta y bendecido por el trabajo generoso de dos persona amadas: Miguel Tizziani, el editor, y Mariano Tizziani, editor del CD y compositor, junto a Daniel Manrique, de la música. ¿Se puede pedir más?

sábado, 19 de junio de 2010

Ellos


¿Espejo de qué?
la turbidez del agua

en la noche del mundo
dos gotas derramadas
redondeadas
tersas
como los cuerpos de ella y de él
brillando
en la inminente luz

viernes, 18 de junio de 2010

Entre amigos

El sábado 3 de julio presentaré, entre amigos, un nuevo libro. La cita es a las 18.30 hs en la Biblioteca 9 de Julio, Martín de Irigoyen 520, Castelar, a dos cuadras de la estación, lado sur. Me acompañarán mis amigos-ángeles guardianes Patricia Morante y Gustavo D´Orazio. Y porque los amigos convocan y los amigos abrazan, te esperamos, para que seas parte de esta celebración.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Fiesta en la Feria

Sobre el filo del cierre, el último día, tuve la hermosa oportunidad de compartir el espacio de narración coordinado por Ana Padovani en la Feria del Libro. Allí estuvieron las queridas Paula Martín y Graciela Sarcone, entre muchos otros narradores que comienzan o que afianzan este camino sin retorno que es la narración oral. Fue, como tantas veces, una fiesta de la palabra y de la imaginación. Fue, como tantas veces, un momento único, irrepetible, uno de esos que te hacen pensar: "¡Qué bueno que estuve ahí!"

lunes, 3 de mayo de 2010

La gota ...

Por fin, después de dos años de añejamiento, salió a la luz La gota que horada los sueños, mi tercer libro de poesía. Fue en circunstancias muy especiales, el sábado 1 de mayo, en el marco del V encuentro internacional Reunión de Voces, organizado por el grupo Pretextos. El querido Gustavo D´Orazio, autor del prólogo, no pudo estar presente pero yo traté de leer algunos párrafos, los que el pudor ante sus bellas palabras me permitió. Patricia Morante, compañera, narradora, poeta, ¡libriana!, leyó con su voz acariciante algunos poemas. Todo fue hermoso, sereno, emocionante, alegre con esa alegría que da el compartir, ya que fueron varios los libros que se presentaron y muchos los poetas que leyeron sus obras. El alma rebosaba de asombros. Los oídos vivían una fiesta de sonidos. Las bocas se llenaban de palabras, de palabras andantes que, enternecidas ante nuestro entusiasmo, hicieron un alto en su andar y nos regalaron pequeñas porciones, todas distintas, de sus tesoros infinitos. ¿Que dónde fue la magia? En el Sadem, Sindicato Argentino de Músicos. De las pitonisas habría mucho que decir. Pero baste con esto: son cinco brujitas, autodenominadas "locas" irreversibles, que vuelan de aquí para allá por todo el salón tocando a unos y otros con su varita. Sí, la magia fue convocada. Y la magia se produjo.

Pronto habrá mas presentaciones y estarán todos invitados. Por ahora va un adelanto, dedicado, justamente, a los poetas:

¿Quién es este loco
que se arrastra por los fondos?
No abandona su destino de lumbre
y calcina con su aliento
el encordado de los sueños.

No es verdad que está maldito.
Antiguas lenguas lo bendicen
y lo empujan al círculo del mundo.

Y él se cree poderoso
(¿no está loco acaso?)
con unas pocas espinas inocentes
ante la roja mirada de los hombres.

lunes, 5 de abril de 2010

NARRATÓN (Olavarría, 2 y 3 de abril 2010) Cuento verdadero

Había una vez un país donde no existían los relojes. Allí el tiempo no se medía en horas, minutos y segundos sino en intensidad. La intensidad, por ejemplo, de la emoción, de la alegría, del abrazo profundo, del aplauso que nace desde el alma y se entrega como un regalo de amor, del apoyo al compañero, del placer de la escucha, de las ganas de comunicar y compartir. Ese país se llama Narratón y queda en las tierras de Olavaría, tierras de bajas temperaturas, que el visitante nunca siente porque la calidez de sus habitantes alcanza para templar el cuerpo y la voz. A ese país llegamos un grupo de narradores de Capital Federal, Gran Buenos Aires y La Plata. Y un invitado especial, andaluz hasta la médula, Miguel Fo. El jefe de la expedición fue Claudio Ledesma, líder, maestro, compañero, narrador de voz acariciante y de mirada franca. Pero en Narratón ocurren cosas poco vistas: los jefes se hacen servidores, los más poderosos sostienen a los más débiles, los más experimentados aplauden a los novatos y todos se suben al tren de cada cuento y se dejan llevar por la voz del narrador o de la narradora por recorridos insospechados, que pueden llegar hasta la luna, echando a volar todos juntos multitudes de mariposas, amasando los más exquisitos chipás, envasando besos caseros para todos los gustos o participando de un baile de disfraces en el Boliche El Resorte, que, aunque usted no lo crea, tiene una sucursal allí mismo, en Narratón. Como si esto fuera poco, hay un fuego que, en las noches, baila sobre los troncos y dibuja en el aire las figuras de los sueños, los recuerdos del pasado y las formas del amor. Y no otra cosa que formas del amor fueron la fidelidad de la gente, chicos y grandes, que nos acompañaron pueblo por pueblo, sin cansarse, dispuestos siempre a escuchar un cuento más; la generosa invitación de Maribel a participar de su programa de radio, después de habernos presentado en cada uno de los museos; la dedicación con que los encargados de La Casa del Deporte nos atendieron y solucionaron los problemitas que se fueron presentado. No otra cosa que formas del amor fueron los abrazos de despedida, las miradas profundas y la promesa de volver a encontrarnos en ese país que no tiene relojes ni tiene colorín colorado porque en Narratón, los cuentos, por suerte, no han terminado.

domingo, 14 de marzo de 2010

Poemita

Quería escribir sobre las catástrofes que han ocurrido aquí nomás, tan cerca, y que tantos hermanos nuestros, haitianos y chilenos, están padeciendo y me di cuenta de la indigencia de las palabras frente a la pavorosa magnitud de los hechos. Entonces entendí que lo pequeño pero profundo (en gestos o palabras) puede ser más útil. Esto es lo que salió. Sé que no es nada. Pero tampoco tiene pretenciones.


Terremoto

Este que tanto fue metáfora
se hizo de pronto contundencia.
Por fin sabemos qué decimos
cuando invocamos su erres y sus tes
aterradoras
su movimiento involuntario
y ese cruel vacío debajo de los pies.





lunes, 22 de febrero de 2010

Antonio Machado, la grandeza de lo simple

Hoy, 22 de febrero, se cumplen 71 años de la muerte del poeta. Sin embargo, está y estará tan cercano, tan íntimo, tan hermanado para quienes encontramos tanta vida en sus palabras, vida de lo sencillo, de lo pequeño a veces, pero tremendamente poderoso, tanto que golpea el pecho, se anuda en la garganta y, de vez en cuando, se vuelca en aguas de nostalgia.


Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.




Nunca perseguí la gloria
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse.

sábado, 30 de enero de 2010

Hay calores buenos







A pesar de que las altas temperaturas de estos días nos han agobiado, hay calorcitos buenos, que estimulan, que emocionan, que hacen sonreír o exclamar, que ponen la piel de gallina. Es el calorcito de la palabra entregada con amor, como un regalo puro y misterioso, que cada uno deberá recibir y descubrir. Es el calorcito de los cuentos. Esta vez compartidos con Claudio, Marta y Juan Pablo, el colombiano de turno en esta contada. Fue el jueves 28 en el Brioche Dorée del Ateneo, precioso, con cositas ricas y con ... ¡aire acondicionado! Proximamente se repetirá. ¡No se lo pierdan!

jueves, 21 de enero de 2010

Para qué la palabra


Este fragmento es de la querida y admirada María Teresa Andruetto y pertenece a su ponencia Pasajera en tránsito. ¡Una delicia!


"¿Para qué escribir, para qué leer, para qué contar, para qué elegir un buen libro en medio del hambre y las calamidades? Escribir para que lo escrito sea abrigo, espera, escucha del otro. Porque la literatura es todavía esa metáfora de la vida que sigue reuniendo a quien dice y quien escucha en un espacio común, para participar de un misterio, para hacer que nazca una historia que al menos por un momento nos cure de palabra, recoja nuestros pedazos, acople nuestras partes dispersas, traspase nuestras zonas más inhóspitas, para decirnos que en lo oscuro también está la luz, para mostrarnos que todo en el mundo, hasta lo más miserable, tiene su destello".

lunes, 4 de enero de 2010

Evocación

El encuentro de narración que tuvimos el sábado pasado en la Plaza de los Españoles, en Castelar, movilizó mucho las evocaciones personales de los presentes. También las mías. Recordé este textito que superpone mi infancia y la de mis hijos. Me volví a emocinar al releerlo y por eso lo comparto:

Strudel para la hora del té


Esta mañana un poema ha venido volando de . . . Bueno, no sé muy bien si los poemas vienen volando desde la eternidad para estrellarse en sonidos y hacerse palabra y desde allí instalarse en lo profundo del corazón o si salen del corazón, se hacen verso y desde allí se despliegan en infinidad de alas sin retorno.
Lo cierto es que el poema rondaba y rondaba y mi corazón parecía ensancharse para cobijarlo o para parirlo.
“Quisiera ser . . . “
Pasaban la horas. Y a mi alrededor todo parecía estar suspendido, esperando, como en una tensa calma.
Son las cuatro de la tarde. Sin darme cuenta, mis pies se han encamiado a la cocina y, cuando reaccioné, ya estaban mis manos tirando harina sobre la mesa.
“Quisiera ser . . . “
Con la voz del verso, otra voz me hablaba. La voz de un niño amado, acunado, eterno niño entre mis manos que me trae de su mano a la niña que fui.
“Quisiera ser . . . “
Azúcar y huevos. Y hay que ver cómo mis manos diligentes amasan y amasan. Y con la masa vienen otras voces y otros versos. Infancia de muñecas y de sueños. Infancia de inocencias y de esperanzas. Se va amasando el strudel y unos ojos asombrados, en la ronda de la calesita, me miran y me buscan y se alegran en mis ojos. Una lluvia de frutas cae sobre la masa y sobre el primer guardapolvo a cuadritos. ¡No te olvides la canela! ¡No te olvides el cuaderno, con cuentitas y renglones recién estrenados! Un toque de azúcar negra le da identidad, casi casi como un diploma que cierra o que abre etapas.
“Quisiera ser . . . “
Ahora hay que arrollarlo y mis manos acompañan el rodillo tierno que va creciendo, como aquellos rulos tibios o esas trenzas rebeldes que no querían venir.
El horno caliente completará el milagro, como todos esos milagros de cada día cuando aquellas pequeñas voces rompían el silencio de la tarde.
Son las cinco. Uno a uno van llegando y elogiando el aroma dulce que inunda la casa. El poema no hace pie, no estalla en sonidos, se queda sin palabras. Nos sentamos a tomar el té.
-¡Qué rico, mamá! Como cuando éramos chicos.
El poema está vivo en la cocina de casa.

domingo, 3 de enero de 2010

Por la paz

La tarde estaba cálida, el aire sereno. Era un buen momento para plantar nuestra pequeña pero firme banderita de la paz. Y nos fuimos a la plaza nomás, a la Plaza de los Españoles. La gente tomaba mate, tocaba la guitarra, jugaba a las cartas o a las carreras; algunos hamacaban a sus bebés; las parejitas se disfrutaban con ternura. Cada uno construía su espacio de paz. Se me ocurrió que cada grupo iba entretejiendo la trama de una historia linda para contar: la historia de la gente que, a pesar de todo, siente que, como dice mi amigo narrador Oscar, la vida vale la pena.
Y claro, no nos podíamos perder la oportunidad. Allí, sentados en el pasto, en ronda, alrededor de ese fueguito imaginario que el calor de la amistad generaba, fuimos desgranando historias, regalos del corazón que cada uno quería brindar al otro con cuidado artesanal, con alegría. La tarde se fue haciendo noche. Y nos despedimos en la penumbra, como para que las sombras se encargaran de guardar todos los tesoros que las palabras habían ido fabricando, mundos donde los recuerdos, las evocaciones y los deseos se hicieron posibles.
Gracias Patricia, gracias Miguel, gracias a todos los que nos acompañaron.