Ese es su sentido, preguntar, cuestionar, aún sabiendo que no habrá respuestas. Y sin embargo, la poesía no conduce a la frustración sino al placer de indagar e indagarse. Poesía en sentido pleno, la poiesis, el hacer con las palabras. Poiesis que no está solo en el género lírico sino en todo arte. En los cuentos populares, por ejemplo, cargados de metáforas y alegorías nacidas del pensamiento más profundo y, por lo tanto, más simple. Como este que encuentro en un blog amigo y que copio para compartir:
El cielo del gorrión
Anónimo turco
Había un gorrión minúsculo que, cuando retumbaba el trueno de la tormenta, se tumbaba en el suelo y levantaba sus patitas hacia el cielo.
-¿Por qué haces eso? -le preguntó un zorro.
-¡Para proteger a la tierra, que contiene muchos seres vivos! -contestó el gorrión-. Si por desgracia el cielo cayese de repente, ¿te das cuenta de lo que ocurriría? Por eso levanto mis patas para sostenerlo.
-¿Con tus enclenques patitas quieres sostener el inmenso cielo? -preguntó el zorro.
-Aquí abajo cada uno tiene su cielo -dijo el gorrión-. Vete… tú no lo puedes comprender…
La poesía conduce al placer de indagar e indagarse.
ResponderEliminarMe gustó mucho esa frase. Me identifico con ella.
Hermoso cuento también.
Un saludo y una sonrisa.
Y feliz fin de semana.