El agua cruje
bajo la cruel pisada del tiempo.
El alma cruje
desde el hondo trepidar del verso.
El agua se quiebra en pedazos de alma.
Solo el verso
con su inocencia de palabras
estalla
en gritos verdaderos.
bajo la cruel pisada del tiempo.
El alma cruje
desde el hondo trepidar del verso.
El agua se quiebra en pedazos de alma.
Solo el verso
con su inocencia de palabras
estalla
en gritos verdaderos.
¡Qué bello! No veo la hora de que salga tu libro...
ResponderEliminarEl otro día con el grupo de narradores me tomé el atrevimiento de leerles "Carta abierta a Sherezhada", quedaron encantados, te mandaron saludos y yo me hacía la linda pensando en lo bien que se narra y se escribe por el oeste.
¡Que viva el cuento y la poesía!
Abrazos.
Hermosos versos Ana...la fuerza de lo simple. Fuerte por natural y sensible. ¡Felicitaciones!
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