domingo, 24 de mayo de 2009

Despedidas

Me toca en este tiempo despedir a seres entrañables que han dejado huella en mí. En homenaje a ellos va este poema:

. . .y un día saldrán volando
desde el fondo de las sombras
dos últimas palomas

girarán en espiral sobre el lomo atigrado de los años

revelarán por fin
las huellas escondidas en el hueso

y se desvanecerán serenamente
en espuma, en polvo, en lluvia de recuerdos
y de olvidos.

Otra de Mario

Un poema premonitorio de alguien que trató a la muerte y la vida con la misma naturalidad:

DESMORIRSE

Cuando muera quisiera desmorirme
tan sólo por un rato para ver
como el mundo se lleva con mi ausencia
Color del texto
a los que lloren les daré un pañuelo
a los que rían un bol de ceniza
indiferencia a los indiferentes

cuando muera quisiera desmorirme
y visitar de nuevo a mis compinches
a los sobrevivientes por supuesto

y preguntarles las poquitas cosas
que se fueron quedando en el tintero
o que neutralizó el silencio turbio.

Mario Benedetti

lunes, 18 de mayo de 2009

Se nos fue Mario

Con la sencillez y la moderación de los grandes, Mario Benedetti, un buen día (ayer, 17 de mayo), nos hizo su último guiño, juntó sus cosas más esenciales (su nobleza, su corazón coraza, su honestidad, su ternura, su compromiso) y se fue silbando bajito, casi como para despistar. Casi como para que no se nos notara este vacío, esta horfandad que nos deja. Y, sin embargo, por esas cosas que tiene el arte (el arte de vivir y el arte de la palabra), resulta que todo lo que se lleva, porque en buena ley le pertenece, nos queda multiplicado en su testimonio imborrable de hombre cabal y en su bagaje de palabra poética. Siempre será para quienes lo admiramos alguien que se animó a ser, tanto en la vida como en la literatura.


Un poema para homenejearlo:


Corazón coraza

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.

domingo, 3 de mayo de 2009

Más poesía

Mi amigo el escritor Eduardo Dayan me acercó estos poemas de María Rosa Mo. Me parecieron muy bellos. En un estilo despojado, trasmiten una búsqueda profunda de lo que está del otro lado de la trama. Sugieren actitud de entrega. Vale la pena compartirlos:

/Murió la abuela y en el pecho un dolor escarlata. No es por ella. Mi padre ha llorado. Nunca llora mi padre. La muerte pasó cerca. Atravesó los ojos de mi madre. Una mujer de la familia ha muerto. He dejado de ser inmortal. /

(de Alba).

*

En cuclillas espero
el recorrido de tu cuerpo
mano que hunde el vacío
estás y no
te encuentro
dentro de mí
habita un fantasma.

*

Sus manos tocan con suavidad
el tallo donde estoy
anclada roza uno a uno
los pétalos que sostienen
toma mi olor como un regalo.

*

Quiero darte de comer
preparar con sal con agua con tomillo
lo que sabe a mi cuerpo.
Brindar con una cucharada de sopa
esto de tenerte.
Volverme hogaza
partirme en dos
regar con vino el olor que nos consuma
fundir mi cintura en una olla.
Que un chasquido de fuego
ilumine esta ofrenda.

(de Eso que fluye)

Un adelanto

Mientras llega la publicación de mi tercer libro (estas cosas llevan su tiempo) va un adelanto:

El agua cruje
bajo la cruel pisada del tiempo.

El alma cruje
desde el hondo trepidar del verso.

El agua se quiebra en pedazos de alma.

Solo el verso
con su inocencia de palabras
estalla
en gritos verdaderos.

14º Encuentro Internacional de Narradores


Los días 1,2 y 3 de mayo de realiza el 14ºEncuentro Internacional de Narradores organizado por la Fundación El Libro en el marco de la 35º Feria del Libro de Buenos Aires. Tuve el honor de ser invitada a narrar algunos cuentos junto a tres narradoras argentinas, Cristina Villanueva, María de los Ángeles Manna y Patricia Orr, y un narrador español, Xabier Puente Docampo. El espacio fue coordinado por la prestigiosa Ana Padovani. Fue un encuentro de amor, comunicación y disfrute en el compartir. Mi gripe (argentina, ¿eh?) no me impidió participar con energía. ¿Será la adrenalina por la situación de exposición ante el público, como algunos me dijeron? Yo prefiero pensar en la magia de los cuentos, que tienen el poder cierto de suspender las leyes del mundo por un rato y sumergirnos en sus propios universos, absolutamente inmunes a todo virus conocido. Lo único contagioso allí es el encanto que la palabra provoca y que puede llevarnos en andas por el territorio de las emociones, del humor, del misterio más hondo. No sé si soy narradora, poeta, escritora, comunicadora. Esos son apenas rótulos. Pero tengo muy claro lo que aspiro a ser, porque es la llave mágica que deriba muros, que construye puentes, que restaura corazones: artesana de la palabra.